Por Bibliotecario
Adaptando el popular musical de Broadway ‘Sweeney Todd: The Demon Barber of Fleet Street’, -que a su vez se basa en varios cuentos y leyendas del siglo XIX-, Burton recupera de nuevo toda la magia y habilidad visual y narrativa que ha caracterizado gran parte de su filmografía.
Admite el propio director que no es muy dado a los musicales, pero que éste tenía algo especial que le fascinaba. No en vano, se trata de algo muy diferente a lo que a uno le viene en mente cuando piensa en este particular género. Es una mezcla de romanticismo y tenebrosidad, con piezas musicales portentosas y ácidas, con un ritmo endiablado y carente de recargadas coreografías. Para que os hagáis una idea, tenemos delante algo más similar a «El fantasma de la Opera» que no a «Cantando bajo la lluvia», a parte de asemejarse a la obra de Andrew Lloyd Webber por su temática trágica y su toque oscuro (aunque eso sí, menos ampuloso y sofisticado).
La historia, en la línea de la más tradicional tragedia griega o shakesperiana, se centra en el personaje de Benjamin Barker (Johnny Depp) y en su personal y macabra venganza contra el indeseable juez Turpin (Alan Rickman).
Tras 15 años alejado de su tierra y su familia y encarcelado por un crimen que no cometió, Barker regresa a su Londres natal para acabar con la vida del hombre que le condenó y le arrebató a su esposa e hija (usease, Turpin).
Oculto tras una nueva identidad, la de Sweeney Todd, Barker vuelve a su antiguo oficio de barbero para llevar a cabo su plan. Para ello contará además con la ayuda de la devota Sra. Nellie Lovett (Helena Bonham Carter), la mujer que tiene un local de empanadas justo debajo de su barbería y que se convertirá en su fiel cómplice. (más…)